Marcelo Guzmán: El desafío es mostrar de la mejor forma al caballo chileno
Por Antonio Arancio Gálvez, enviado especial a Tryon. Fotos: Pablo Pérez Gómez.
Marcelo Guzmán Recart tiene una vida entera dedicada a los caballos. Se declara un huaso de tomo y lomo y su carrera corralera lo llevó a altos niveles como campeón de clasificatorios o finalista de Chile. Su tránsito a la Rienda Internacional ya lleva varios años, y siempre tuvo como horizonte profesionalizarse al máximo.
Viajó y se empapó de este mundo del Reining en Europa y Estados Unidos. Y su punto máximo fue la clasificación a los Juegos Mundiales Ecuestres 2018 con récord de puntaje en una prueba CRI 3 de FEI en los lomos del potro Las Callanas Profanao.
Guzmán y el Profanao se preparan intensamente en el caluroso Tryon International Equestrian Center, en Carolina del Norte, para competir el miércoles 12 de septiembre.
"Estamos trabajando a fondo y aclimatando a los caballos. Al Profanao lo siento muy bien en la pista, está progresando y lo siento en un nivel súper bueno. Estoy tranquilo y concentrado en que el caballo esté en la mejor forma posible para pasar el chequeo veterinario y luego lucirlo en la pista", dijo Guzmán a CaballoyRodeo.
"Estoy con hartas ganas de entrar a la pista el miércoles a representar a Chile. Creo que hemos hecho un buen trabajo para mostrar de la mejor forma al caballo chileno, ese es mi gran desafío", añadió.
Guzmán explicó que además de los resultados deportivos "aquí también se busca aprender más, ver y codearse con los 'Loayza y Tamayo' de la Rienda Internacional. He trabajado con mucho de ellos o he podido conocerlos. Estar acá en los Juegos Mundiales es una tranquilidad y una felicidad enorme. Hay que buscar hacerle collera a ellos, que son los mejores jinetes del mundo".
Consultado por su raíz corralera, Guzmán destacó que "siempre he dicho que estoy muy orgulloso de ser un huaso chileno y que gracias a ello y que aprendí a montar en el Ejército he llegado a este nivel en la Rienda Internacional. En Chile tenemos gran potencial, grandes jinetes y un caballo maravilloso; y tenemos que atrevernos a invertir… y me refiero no sólo a plata, sino que a tiempo porque hay una tremenda vitrina para nuestro caballo. Tenemos calidad de sobra, pero hay una gran tarea en la selección, nos falta porte (alzada) para este tipo de disciplina. Falta ese compromiso como criadores".