Rodolfo del Prado de la Vega: Historia de un viaje
Este es un texto recopilado del Anuario de la Federación de Criadores de 2002 que homenajea la figura de Rodolfo del Prado de la Vega, huaso y criador insigne de Villarrica que falleció el martes pasado.
Rodolfo del Prado de la Vega: Historia de un viaje
Quien no conoce al tío Beto en el sur de Chile no conoce la nobleza del alma del huaso chileno. No conoce del afecto y de las tradiciones y menos conoce de un corazón magnánimo y acogedor como pocos, que nos ha formado con la sabiduría del pasado, y nos recuerda con su ejemplo de vida, como vivir el presente.
En el año 1896 llegan a Argentina desde Castilla de León, España, don Fernando del Prado González y doñaCarolina deLa Vega del Río. Trasladarse al sur del mundo era en aquellos años hacer historia. Traían la ilusión de formar una familia con trabajo y esfuerzo y el sueño de encontrar aquí el cariño de quienes conservan el ancestro español y le respetan uniendo progreso y tradición.
Inician un largo viaje que tiene como primer destino General Alvear a 80 kilómetros al sur de Buenos Aires, donde instalan un pequeño negocio, que al poco tiempo sufre los estragos de un incendio, lo que les obliga a reiniciar la marcha.
En el transcurso de ese viaje nace don Rodolfo del Prado de la Vega, el tío Beto, un 27 de agosto de 1920. Pocos años después se llega a la localidad de Cholita,300 kilómetrosal sur de Bariloche. Allí don Fernando y doña Carolina y sus 14 hijos se abastecían desde la localidad lejana de Bahía Blanca gracias a la mansedumbre de dieciséis mulas y al arduo trabajo de una familia unidad.
En 1927 producto de conflictos sobre la propiedad de las tierras en Argentina, asunto del gobierno de entonces, deciden una vez más reiniciar el viaje, esta vez con destino a Chile. En la ciudad de Loncoche compran el fundo Llullunco de360 hectáreas, donde inician actividades de lechería.
Quise rescatar el relato de este largo viaje porque su última parada es nuestra patria, y porque su legado nos pertenece.
Ya asentados en Chile, los hijos ayudan en las labores agrícolas a sus padres. El tío Beto, después de haber completado sus estudios se inicia como martillero en las ferias de Lanco y posteriormente se hace cargo dela de Villarrica. Esdurante esa época, cuando en Huíscapi, conoce y se enamora de Norma, quien sería posteriormente su esposa.
Su primer contacto con una medialuna había ocurrido cuando a los siete años llega junto a sus padres y hermanos al fundo Llullunco. Su anterior propietario, don David Rosas, era un gran aficionado a las corridas de vacas, para lo cual tenía una buena masa de caballos quilamutanos, los que el tío Beto alcanza a conocer e incluso ve trabajar en el mismo campo, durante los días en que se produce la entrega del fundo.
Convencido su padre que una medialuna era sinónimo de deporte, o lo que es lo mismo, entretención, y por lo tanto poca dedicación al trabajo del campo, ordena de inmediato que se desarme, para así poder dedicarse de lleno a la limpieza de montes y preparación de las tierras para la siembra de las próximas cosechas.
Los comienzos eran difíciles, el campo se recorría a pie como también a pie debían caminarse los cinco kilómetros para ir a clases, a la escuela pública de Loncoche. "Mejor, dice el tío Beto, así uno sabría apreciar el valorde un caballo".
En 1940 el gran criador señor Baltazar Puig, llega con sus caballos al fundo Llullunco, para participar en el Rodeo de Loncoche. Ahí los hermanos Del Prado de la Vega conocen de todos los arreglos y preparativos previosde un Rodeo.Autorizados por su padre lo acompañan a la medialuna la tarde en que se corre el Champion, y que gana don Baltazar Puig en dos yeguas preciosas.
Entusiasmados con lo que han visto, y creyendo que la cosa no es tan difícil, con sus hermanos Polo y Amado y con Teobaldo Araya, un vecino de Loncoche, trabajan sus caballos brutos y aceptan la invitación a participar en una pichanga, donde los Barrientos, unos vecinos con campo distante, a unos quince kilómetros, que tenían medialuna en su casa. Salen en la noche del sábado, corren durante todo el día domingo, volviendo a medianoche para estar a las siete de la mañana en su trabajo.
Su resultado es muy malo, y se dan cuenta que para correr en un rodeo es absolutamente necesario prepararse ellos y arreglar sus caballos. Ninguna de las dos condiciones habían cumplido antes de participar en la pichanga, por lo que resuelven juntar dinero para adquirir caballos y aperos, y así prepararse debidamente.
Cuando ya egresan de la Escuela Agrícola, realizan trabajos extraordinarios para ir juntando peso a peso. Junto con don Polo podan mil árboles donde los Millán, a un peso cada uno, con lo que compran sus primeras monturas. Más adelante ya el dinero les alcanza para los caballos y se van a Osorno, donde don Pepe Aranda, gran criador de la zona.
Trabajan sus caballos, organizan el Club de Loncoche, y contagian con su entusiasmo a todos los vecinos de la zona, llegando a tener dieciocho niños participando en las tiraduras en rienda durante las actividades que realizaban en su medialuna.
Con su hermano Polo corren por primera vez un Rodeo Oficial en Loncoche, y empatan con los famosos hermanos Julio y Tito Santos, quienes en Carbón y Alquitrán se quedan con el Champion de los ganadores.
Don Pedro Danteac, suegro de don Polo, le facilita a tío Betola yegua Curirrunca, una yegua mestiza que junto al Rencor, que corre don Polo, le permite ganarse a los hermanos Del Prado, Champions en Lanco, Miraflores, Panguipulli, SanJosé dela Mariquina, Pucón y Villarrica.
Su primer caballo inscrito es el Conde, un hijo del Durazno, el que corre con el Barquillo y el Caruzo.
Emocionado recuerda los triunfosde su caballoConde, más que cuando viene a correr al Campeonato de Chile, en Rancagua, cuando corriendo con Juan Ramón Álvarez el Rodeo de Vilcún, éste se suspende por lluvia antes de correr el cuarto animal y se continúa en la mañana del sábado siguiente, en Gorbea. Antes del inicio del Rodeo local se corre la Final de Vilcún. Empata el Champion con Ignacio y Nicanor Cortés, el que se define en dos novillos extras a favor de los hermanos Del Prado. Al día siguiente vuelven a ganar el Champion, esta vez del Rodeo de Gorbea.
Radicado en Villarrica, es el alma de nuestro deporte enla zona. Estal su entusiasmo y dedicación que sus rodeos son considerados los mejores organizados en el Sur. Llega a tener ciento diez colleras participando en las series libres de sus rodeos en el verano. Don Ramón Cardemil, Gonzalo Vial, don Jorge Lasserre, don Santiago "Chanca" Urrutia, Arturo Correa, Fernando Parada y Antonio Peña, y tantos otros, año a año llegan durante el verano a participar en el Rodeo del tío Beto en Villarrica. A todo reciben tío Beto yla señora Normitaen su casa, a todos atienden con ese corazón grande que le conocemos.
Con mi mujer y mis hijos hemos querido escribir estas líneas como una forma de resaltar el trabajo y dedicación de hombres buenos que lo han dado todo por nuestro deporte y caballos chileno, aquellos que en el seno de una vida de esfuerzo y trabajo han forjado las virtudes humanas que traspasan a las familias del rodeo.