Criadero Ña Flora lamentó el fallecimiento del gran potro Cantinero
El Criadero Ña Flora, propiedad de Rodrigo Miranda Garbarini, sufrió un duro golpe el viernes 30 de agosto con la muerte de su emblemático potro Ña Flora Cantinero (N° 143007), que le dio muy buenos resultados a la familia Miranda Rikli tanto en la parte deportiva como reproductiva.
El barroso Cantinero, hijo del bicampeón de Chile Maquena Canteado en la yegua Ña Flora Marihuana, falleció a los 28 años, dejando una huella imborrable para don Rodrigo y sus hijos.
Rodrigo Miranda Rikli, quien tuvo una especial relación con el potro, expresó su sentir tras la partida del noble ejemplar.
"Fue una noticia lamentable y bastante triste para todo el criadero, para mi padre, para nosotros como hermanos y para mí. Fue un potro insigne, en el que personalmente llegué por primera vez a Rancagua en el año 2012, corriéndolo yo. Era muy bueno, de muchas condiciones, criado por nosotros y con el pasar de los años lo empezamos a reproducir. Es el padre de casi todos los caballos que hoy estamos corriendo; todos los caballos con que hemos llegado a los Clasificatorios y Rancagua en los últimos años son hijos del Cantinero, así que ha dado muy bueno y ha significado mucho para nosotros por todo eso", expresó.
"Ha marcado varios hitos para nosotros, que tenemos un criadero chico que si bien no reproduce tantas yeguas, él fue un potro tremendamente exitoso en la parte reproductiva, muy ligador, virtudes que no todos los potros tienen. Dio bueno y ligó sus cualidades vaqueras y deportivas en distintas madres", agregó.
Miranda Rikli manifestó su admiración y agradecimiento hacia Ña Flora Cantinero.
"Uno en la vida no siempre tiene la posibilidad de correr caballos como ese, creo que me va a costar volver a subirme a un potro de esa calidad y de esa categoría. Uno también se va haciendo conocido gracias a los caballos y este potro barroso se fue destacando en las medialunas, a uno lo fueron conociendo por él y después por su descendencia. Entonces, dejó una huella bastante grande para nosotros, en la asociación, en quienes lo conocieron y también en varias partes con las crías que dejó, que ya han dado resultado", expuso.
Con respecto a su debut en Rancagua, el año 2012, recordó: "Fue una experiencia bastante bonita, estuvimos con don Jorge Navarrete corriendo con una yegua criada, la Presilla, una hija del Pretal. Completamos en un par de rodeos, en Osorno estuvimos en dos series cerca de premiar y entramos en la última libre con 24 puntos, empatando con colleras muy buenas, en un Clasificatorio muy competitivo. En Rancagua no se nos dio, pero estuvimos bastante cerca en una serie también, corriendo tres y hasta cuatro animales. Fue un caballo que me marcó de por vida".
Con respecto a otros logros del Cantinero, apuntó: "Fue un caballo que se completó seis veces, con distintas parejas y siendo corrido por jinetes amateurs. En el caso mío con mi hermano, teníamos 20, 22 años más o menos en esa época y tal vez no tuvo más campaña ni pudo estar más arriba porque faltaban los jinetes. Quizás en otras manos ese potro habría llegado mucho más arriba. De hecho, quisieron comprarlo varios criaderos grandes para la reproducción, otros para correrlo y mi padre siempre privilegió dejarlo en el criadero, porque fue criado por él, por el cariño que había y porque también le tenía mucha fe en la reproducción y gracias a Dios no se equivocó".
"Hoy tenemos más de 25 caballos hijos del Cantinero. La temporada pasada completamos dos parejas, hijas del Cantinero. Una es de la yegua Compostura, que salió tres años seguidos la Mejor Yegua de la asociación, con la Callana, que son propias hermanas; y las otras yeguas que también completamos, son la Camanchaca y la Copucha. Y dejamos una collera de potros con 13 puntos, el Carajo con el Cambalache, que los paramos porque eran nuevos y también son hijos del Cantinero", añadió.
Rodrigo Miranda destacó que "nunca lo vamos a olvidar, ha tenido seis caballos corriendo el Campeonato Nacional y uno de ellos, El Bolsón Campero, corrió en la Final del domingo hace un par de años atrás.Se reprodujo poco, a lo mejor no tiene tantos caballos ni tan conocidos, porque lo reprodujimos nosotros y un par de amigos, pero de los siete u ocho caballos mayores que tiene, han llegado todos a los Clasificatorios y seis de ellos a Rancagua. Es un potro que se ganó su espacio como reproductor y se ha hecho bien conocido por esos logros".