Reglamento de Los Maestros de la Escuela Ecuestre Huasa fue formalizado

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El Reglamento de Los Maestros de la Escuela Ecuestre Huasa elaborado por la Comisión Patrimonio y Cultura de la Federación Deportiva Nacional del Rodeo Chileno ya es una realidad, luego que su texto definitivo fuera formalizado en la pasada sesión ordinaria de Directorio, con lo que quedó estipulado cuáles son las normas para la calificación y otorgamiento de este título, cuáles serán los reconocimientos históricos y además se crea la Comisión de Arreglo y Bienestar del Caballo.

Esta iniciativa fue presentada y aprobada por la Asamblea durante el Consejo General de diciembre del 2020, y en ella se recoge parte importante de la historia de nuestra tradición de Escuela Ecuestre, que existe desde sus orígenes, pero no se había tenido la prudencia de dejarla establecida de manera formal y directa.

El presidente de esta Comisión, Hernán Bonilla, explicó que en el interior de la instancia "estábamos analizando el rescate de nuestras cosas, y cuando hablo de cosas me refiero a los aperos, etcétera, pero nos dimos cuenta que lo más importante no son las cosas, sino que las personas y efectivamente por el hecho que hayan estado un poco tras bambalinas, era necesario rescatarlas. De ahí surgió esta idea".

En tal Consejo General fue encomendado efectuar precisiones en el proyecto, para cuyos efectos se designaron dos integrantes por cada una de las zonas del país corralero y el trabajo se terminó de ejecutar en junio, fue presentado al Directorio, el cual en cumplimiento de lo mandatado por la Asamblea, le dio su la formalización final.

"Estuvimos casi un año, poco menos, teniendo reuniones todos los jueves y trabajando de manera metódica. Los aportes gigantescos fueron de Arturo Montory, Alberto Cardemil y Luis Valentín Ferrada en ese aspecto con toda la información que ellos tenían de muchos años y las fuimos sistematizando, fuimos encontrando puntos comunes para destacar a una persona de estas características. En el listado que hay son personas que al final del día le dedicaron su vida a los caballos, no fueron una estrella fugaz en el firmamento, son personas que generaron una escuela algunos y otros las siguieron de manera magistral. Eso queríamos destacar", indicó el director de la FDN.

"Siempre he dicho que los jinetes son unas personas indispensables en esto, pero detrás hay personas que arreglaron esos caballos para que los jinetes se pudieran lucir. Ya hemos destacado a nuestro caballo como un monumento natural, y el hombre es parte importante de esto, en este caso pensamos que al primero que había que poner en valor y misión era exactamente a las personas que arreglaban, los maestros de la escuela ecuestre. Así se llama en cualquier disciplina ecuestre mundial, y por eso les pusimos los Maestros de la Escuela Ecuestre Huasa", continuó Bonilla.

De acuerdo a lo que manifestó, "tuvimos hartas posibilidades y discutimos bastante sobre cuál iba a ser el nombre, al final concluimos que ésta era la más convocatoria de todas las actividades en torno al caballo".

Por esto, postuló que en la Federación "hubo un apoyo unánime. Eso es importante, muchas veces algunas ideas que se plantean en un Consejo tienen alguna observación, muchas veces muy razonables, y en este caso la idea fue aprobada por unanimidad y nos sugirieron que dos personas de cada zona hicieran observaciones que se pudieran enmendar, que efectivamente había que corregir, y se hizo de esa manera. Hoy tenemos este primer paso".

"Es un primer paso porque nuestra intención como organización es postular esto a un Patrimonio Cultural Inmaterial, para que logre tener esta calificación; es nuestro segundo peldaño en esta escalera que estamos empezando a recorrer", destacó.

Este reconocimiento nace de la visualización de los integrantes de la comisión de que el elemento humano, factor fundamental y básico de cualquier tradición, en nuestro acervo cultural campesino y huaso estaba mimetizado o confundido, sin tener el destacado lugar que merece y con esto se pretende colocarlo dentro del Rodeo en el digno sitial que se merece.

Bonilla igualmente estipuló que "los integrantes de la comisión han recibido con mucha alegría este apoyo de las asociaciones que han comprendido la necesidad de poner en relieve estos integrantes del mundo del campo, las tradiciones, la cultura y el rodeo".

Además, la Comisión de Patrimonio y Cultura aprobó el proyecto de Amazonas que ha liderado Gabriela Balmaceda, que ha comenzado con la aprobación de las modificaciones del Reglamento del Movimiento a La Rienda, en la que se ha incluido esta modalidad.

La visión de Arturo Montory

Uno de los grandes aportes para la elaboración del texto llegó por parte del historiador del rodeo y del caballo chileno, Arturo Montory, quien también detalló cómo se realizó el trabajo que culminó con la formalización de este Reglamento.

"Esta inquietud nace cuando se creó la Comisión Patrimonio y Cultura por iniciativa de Cristián Leiva, el presidente. Con Hernán Bonilla hace tiempo veníamos con una inquietud de hacer cosas de patrimonio y tradición, pero no nos había resultado. Ahora, con la venia del presidente se armó y nos llamaron a Luis Valentín Ferrada, a mí, y Alberto Cardemil estaba en ese tiempo ya haciendo cosas de la Prueba de Amazonas, así que se incluyó a Gabriela Balmaceda", declaró.

"Estas inquietudes de los arregladores la traíamos de hace muchos años. Que a todos los participantes en lo que es el caballo chileno tienen destacada actuación los criadores, jinetes, dirigentes y los arregladores pasan a ser de segundo plano. Según siempre han dicho los antiguos criadores, en un criadero el 50 por ciento es la genética y el 50 por ciento el arreglador, cuando hablamos de caballos vaqueros. Un gran criadero sin arreglador no llega a ninguna parte y un gran arreglador sin caballos no llega a ninguna parte. Esta conjunción de arreglador y caballos que le sirvan produce el alza de grandes caballos, grandres criadores y grandes arregladores", argumentó.

En ese sentido, continuó indicando que "al principio dijimos, vamos a hacer un reglamento para que haya un reconocimiento a los arregladores y a medida que fuimos conversando porque hicimos 33 reuniones desde octubre hasta la fecha, por Zoom, y nos fue creciendo el proyecto. Al principio hablamos de cinco arregladores, pero luego dijimos que para que un arreglador exista debe haber un engranaje completo para que se luzca el producto final".

"Ahí decidimos incluir en ese listado a todos los grandes criadores, dirigentes, arregladores y jinetes desde 1780, más o menos, en adelante. El listado que hay es de 1760 hasta que murió Ruperto Valderrama, que fue el último que falleció. Está todo ese tiempo y fuimos eligiendo, porque no podemos poner 2.000 personas, y finalmente quedaron 300 personas, de los que fueron los más destacados en un rubro en cada época. La fecha que se señala es la época en que más se destacaron, no cuando nacieron, porque una persona pudo actuar durante 50 ó 60 años, pero se destacó en esa fecha. Por año de nacimiento hay mucha distancia, porque algunos actuaron más viejos y otros más jóvenes", postuló.

"Para que existiera todo este asunto de arregladores de caballos había que contar primero la historia de los caballos, de donde venía, las condiciones morfológicas y funcionales; además, se agregó la literatura, que es un orgullo para la raza contar con esa cantidad de autores desde el año 1600 hasta ahora, así que están todos los libros que se han hecho en relación a este tema y se decidió separar las personas que habían fallecido y darles un premio a los arregladores más connotados que todavía están vivos. En su fecha teníamos puesto a Jano Fuentes, que murió hace poco, a Ruperto Valderrama, pero lo tuvimos que cambiar, a Calixto Vilches también, porque se fue demorando y pasó esto. Se decidió que los arregladores actuales, que están vivos, se les iba a dar un reconocimiento en el Champion de Chile, en Rancagua, a todos juntos, que son como 28 ó 30", anticipó Montory.

También el historiador explicó que en este reglamento se "crea una comisión especial, encargada de dar año por año al arreglador que sea por tradición, no el mejor por año. No va a coincidir que haya arreglado el caballo campeón de Chile, tiene que ser un arreglador que tenga campaña. No existe arreglador con un caballo, tiene que tener por lo menos 15 ó 20 años y con algún éxito. Ese es el premio que empieza a surgir una vez que esté publicado esto. Ese premio será año a año y lo dará la comisión que ahí se nombra".

"Este reglamento creo que es lo más importante que ha hecho la Federación de Rodeo desde su creación. Es más importante que la medialuna nacional que es física, esto es intelectual, historia, es reconocer a personas que nadie las ha escuchado hablar en su vida, están los arregladores de Aculeo, arregladores de Pavez, de Curiche, de mil criaderos que la gente nunca supo que existían. Yo conozco la historia de los 300 que hay ahí, no hay ninguno que sea al azar, todos tienen su historia y la tengo clarita. No hay nadie que no esté justificado de los que estén ahí. No son nombres al azar que elegimos", aclaró.

"Otra cosa destacable es que esto es de una gran importancia a nivel mundial en relación a la equitación. Por eso, el trabajo que viene adelante de tratar de hacer que la Unesco lo reconozca como un bien inanimado, que es más difícil que lo animado. La Escuela Ecuestre es algo que es más difícil de comprobar, pero desde el momento que se publique, le da un carácter nacional e internacional y va a ser reconocido por todo el mundo. En América nadie tiene esto, lo tienen los italianos, los franceses, españoles de hace 500 años, pero desde ahí en adelante nadie tiene un reglamento como el que se acaba de hacer", manifestó.

Por último, explicó que la intención es que exista un monolito en la Medialuna Monumental de Rancagua con los nombres de todos quienes cuentan con esta distinción y completó sus dichos sosteniendo que "aquí no es solo sobre rodeo, es un conjunto de cosas que es el arreglo del caballo chileno. Es una escuela. Aparecen arregladores por línea directa como los Bustamante, que son desde 1850, el Bustamante más antiguo. Desconocer eso es imposible, es una realidad y una realidad chilena y huasa y esto valoriza al caballo chileno, porque parte del caballo chileno es lo que le impusieron mentalmente los arregladores".