Recuerdo de una gran campaña solidaria: Los huasos ayudaron a los afectados por los mega incendios del 2017

En enero y febrero del 2017, la Zona Centro Sur del país se vio afectada  por una gran cantidad de incendios forestales, de devastadora contundencia, dejando cientos de damnificados y una gran destrucción. Cuadros dantescos se podían apreciar en distintas comunas y localidades de esta zona del territorio nacional, involucrando a personas, animales, casas, corrales, pesebreras y bienes familiares.

En ese momento, como otros que han quedado registrados a fuego (valga la semejanza), en la historia de nuestro país, surgió el espíritu solidario del chileno y del huaso en particular. Fue así como corraleros y criadores se hicieron presentes para ir en ayuda de los compatriotas, siendo encabezados en las campañas solidarias por la Federación Deportiva Nacional de Rodeo Chileno y la Federación Criadores de Caballos Raza Chilena.

En diálogo con Caballoyrodeo.cl, Ives Richasse Acevedo, director de la Federación del Rodeo recordó aquellos momentos cruciales en la historia reciente de nuestro país y cómo se hizo presente la institución.

"Para mí fue una sorpresa haber sido la cara visible de la Federación, ya que era presidente de la Asociación Valle Santa Cruz en ese tiempo. Sobre todo lo digo por las zonas que fueron tan afectadas, como la de Cauquenes, donde estaba Pablo Quiroz. A mí me tocó la zona de Colchagua, Lolol, Chépica, Santa Cruz, Peralillo, Palmilla y de ahí hacia la costa, Pumanque", comenzó señalando.

"Fue una experiencia muy bonita, porque nosotros vivimos en carne propia todo lo que fueron los incendios. Lo sentimos en amigos, en arregladores que perdieron pesebreras con caballos. Amigos a los cuales se les quemaron caballos encerrados, como los Vallejos, aquí en Chépica. Fue fuerte y es siempre gratificante llegar con ayuda cuando uno más lo necesita, que fue en febrero del 2017", expresó.

Hizo hincapié en que ante este desastre "se notó de inmediato la respuesta de los huasos. Como siempre, desde que yo estoy en las campañas. Hubo las mismas fuerzas, las mismas ganas de ayudar. Tanto del Directorio de la Federación, que estaba en ese momento, como así también de Pablo Aguirre, quien fue una de las personas que ayudó mucho a los afectados de esta zona, mandando forraje para los animales".

"En esa fecha, por parte de la Federación de Criadores y de la Federación de Rodeo, en la zona donde yo estaba, prácticamente se envió forraje, casi en un cien por ciento. Independiente de eso hubo campañas de las mismas Asociaciones, de la Cardenal Caro como de la Valle Santa Cruz y personas anónimas, que se pusieron con materiales para reconstruir galpones, casas que se perdieron", añadió.

Asimismo, rememorando aquellos días marcados por estos incendios, dijo que "hubo una comunicación constante; también estuvo presente el agradecimiento de los afectados que recibieron esta ayuda. No siempre se puede llegar a toda la gente, pero se hizo un esfuerzo tremendo por tratar de llegar. Hubo gente  de Melipilla y de la Zona Norte, que también nos cooperaron  con forraje y que llegaron en forma anónima tanto a la zona de Cauquenes como a la zona de Colchagua. Hubo mucha gente que estuvo involucrada y el agradecimiento de la gente era hasta con lágrimas, ya que no tenían nada qué comer".

"Yo te diría que fue tan bonita esa experiencia como la que hubo el año antepasado (2019) con la sequía en el Norte. Fue una vuelta de mano por todo lo que ellos nos colaboraron a los afectados de la Zona Centro Sur por los incendios. De la Zona Norte también hubo agradecimientos tanto de las Autoridades como de pequeños agricultores, muchos de ellos afectados por la sequía. Varios de ellos llegaron a las lágrimas", afirmó.

"A mí me ha tocado estar en tres, cuatro campañas ya y te voy a decir que cada día me sorprende más la reacción de la gente en cuanto a la gratitud que muestran hacia nosotros, por la ayuda que hemos entregado", enfatizó finalmente.

Criadores, los animalistas más grandes

A su vez, la campaña de ayuda efectuada en ese 2017 por la Federación Criadores de Caballos Raza Chilena la encabezó  el director César Núñez Villarroel, en ese tiempo secretario general de la institución. En contacto con Caballoyrodeo.cl recordó cómo se generó esta ayuda a los afectados por los incendios.

"En los meses de enero, febrero de 2017, mientras estábamos en la Final Nacional de Rodeo para Criadores en San Clemente, supimos de la gran cantidad de incendios que estaban afectando distintas zonas del centro del país. Rápidamente, acompañado del Gerente Técnico de la Federación de Criadores, Gabriel Varela, comenzamos a realizar un sondeo de lo que ocurría en el mundo criador. Fuimos a visitar al criador y alcalde de la comuna de Marchigüe, Héctor Flores, y nos dimos cuenta en terreno, que la catástrofe era gigante y que como Federación debíamos ir en ayuda de los damnificados", señaló.

"Ante esta situación, con mi amigo Abel Bravo y Luis Iván Muñoz, vía telefónica por su eficiencia y rapidez, comenzamos y planificamos poder ir en ayuda de nuestros asociados. Más adelante nos dimos cuenta que si bien no habían caballos siniestrados entre nuestras bases, la disponibilidad de forraje y lo que les había pasado a cientos de animales equinos, bovinos, ovinos, caprinos y otros era devastador", agregó.

Precisó que para ese entonces Abel Bravo era director a cargo de la Comisión Relación con las Asociaciones, añadiendo: "Y en conjunto e informando siempre al directorio de la Federación de Criadores, nos pusimos de acuerdo para ir en ayuda de las zonas damnificadas. En la estructuración de la campaña trabajamos con el criador Moisés Valenzuela, quien coordinó todo desde Santiago basado en la información que él manejaba de los diferentes sectores y lugares que estaban siendo azotados por esta catástrofe".

"Fue así como salimos a comprar como Federación los primeros fardos para actuar de forma rápida y llegar con la ayuda a los lugares que lo necesitaban, mientras seguíamos en coordinación con las asociaciones y éstas enviaban aportes en dinero o las innumerables camionadas de pasto y bolos que comenzaban a aparecer para los diferentes zonas. Era vital ir en ayuda inmediata de forraje y así continuamos posteriormente canalizando la ayuda que gestionaban cada una de las asociaciones de criadores del país", manifestó.

"Fueron semanas de mucho trabajo en donde, y en conjunto con el Departamento Técnico, visitamos los sectores afectados y levantamos un catastro de las necesidades que se tenían y cómo podíamos distribuir la ayuda que nos llegaba de distintos sectores", añadió.

Contó que mientras se trabajaba en ello y se recorría entregando la ayuda, frente a un panorama dantesco, apareció en un canal de TV la triste situación del Pequeño Esteban Cáceres y su yegua Chascona "en donde el amor por el caballo fue lo que nos tocó en los más profundo de nuestra alma criadora y optamos por ir en ayuda de Esteban y Chacona, ya que eran ellos quienes interpretaban el cariño que siente un criador".

"Y fue así que se envió un camión acondicionado y personal de la FCCRH para traer la yegua al Criadero La Esperanza, para comenzar un tratamiento médico y de curaciones, el cual después de meses de trabajo y dedicación logramos salvar. Lo demás ya es historia conocida", recordó.

Contó también que "la ayuda siempre fue canalizada por medio de los municipios afectados y/o instituciones público privadas que estuvieran trabajando en la atención de los animales quemados. Llegamos a diferente comunas y sectores como: Marchigüe, Pumanque, Hualañé, Canoe, Vichuquén, San Javier, Constitución, Empedrado, Maquehua, Santa Olga, Cauquenes, Sauzal entre otras que se me pueden olvidar. Y al centro de rescate que instaló la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad Andrés Bello en Doñihue".

Respecto de la respuesta de los criadores asociados a la solicitud de colaborar, manifestó: "Extraordinaria, maravillosa; apenas tomamos contacto con cada presidente y con cada criador se comenzó a mover un andamiaje gigante que sólo son capaces de mover los criadores organizados por una buena causa. Fue como así comenzaron aparecer depósitos y movimiento de camiones desde las distintas zonas del país a las zonas donde habíamos levantado la información y en donde se requería de la ayuda".

Dijo que la Federación de Criadores canalizó la ayuda directamente que consistió en forraje en forma de heno y bolos, medicamentos veterinarios y materiales para poder restaurar los cercos que fueron arrasados por el fuego.

En cuanto a cómo respondieron los afectados que recibieron esta ayuda, enfatizó: "Era gratificante y nos instaba a seguir al día siguiente al ver la cara de alegría y tranquilidad de muchas personas cuando llegábamos con nuestras banderas de la FCCRCH y camiones con forraje a los centros de acopio, donde esperaban para ser distribuidos. Esa imagen, para quienes estuvimos ahí, creo que era la otra cara de la moneda que se vivía en esos momentos. Y era lo que queríamos y tratamos de hacer llegar a nuestros socios por medio de fotografías y relatos en su momento, ya que era eso lo que nos instaba a seguir sin parar".

Al consultarle  qué sentimiento provocó en la Federación de Criadores haber participado en esta cruzada y qué fue lo más significativo, lo más valioso de recordar, puntualizó: "Personalmente, creo que poder ayudar a quien está afectado por cualquier problema en la vida y poder dar una mano siempre es y será gratificante. Creo que haber tomado el caso de Esteban y su yegua marcó la pasión criadora y cuánto somos capaces de dar por el bienestar de nuestros caballos. Y cómo fuimos capaces de mostrar al país entero, que nosotros los criadores somos los animalistas más grandes que pueden existir y la preocupación que tenemos en nuestro diario vivir por nuestros animales".