Santa Isabel, la historia de un ícono en la Crianza y el Rodeo
Fuente: www.criaderosantaisabel.cl
El Criadero Santa Isabel llega a su fin, pero su nombre quedará por siempre en la memoria de los amantes de la Crianza del Caballo Chileno y del Rodeo Chileno, por los grandes hitos que marcó en esos ámbitos.
En esta nota, repasamos la trayectoria de este gran criadero, según los datos publicados en su sitio oficial.
Este plantel remonta su historia al año 1882, cuando Agustín Edwards Ross adquiere a Ignacio Díaz Valdés, el reproductor Guante I, potro nacido en 1867, originario de las crianzas de Patricio Larraín Gandarillas, anterior propietario de la Hacienda Aculeo. Este reproductor es considerado por su pureza, conformación y bondades de obra como "Tronco Origen" de una de las familias más relevantes del caballo chileno actual.
Este antecedente marca el inicio de Santa Isabel en la crianza y el fomento del caballo chileno, con el impulso de don Agustín Edwards Ross, que crió entre otros, al Tintero, hijo de Guante I, bisabuelo materno del famoso Quebrado.
Agustín Edwards Ross era el bisabuelo del ex presidente de la Federación Criadores de Caballos Raza Chilena, Agustín Edwards Eastman.
Es, sin duda, este criador quien impulsa y trasciende la obra de sus antecesores al reunir a mediados del siglo pasado en el criadero Compañía Agrícola Chilena, que administraba Alberto Araya Gómez, y cría el famoso Granerino, hijo de Enchufe padre del Mapuche ya inscrito por Santa Isabel, y abuelo materno de la Amargura.
Después en la hacienda Coipúe, cerca de Villarrica, un conjunto de yeguas de selección y potros de gran nivel como No Me Toques II, Roncador, Olvido, forman la base actual, como Chasquita, madre de la Campeona Esbelta. Salen caballos de la talla de Coipúe, el precioso Arroyito y las yeguas tordillas Marmita y Pichoga corridas por José Manuel Aguirre y Oscar Bustamante.
En 1972 la hacienda Coipúe es expropiada por la Reforma Agraria, lo que lleva a Agustín Edwards Eastman, en 1982, a reanudar la crianza en el fundo de Graneros.
En este período, se adquiere el potro Campeón de Chile Estribillo (Estribo-Guaraní-Quebrado), a don Alberto Schwalm Bielefeld, y posteriormente el potro Riguroso (Rigor-Comunista-Quebrado), a don Alberto Montt Mujica, fortaleciendo, por medio de estos reproductores, una de las corrientes más trascendentes de la raza, como ha sido la línea del Quebrado.
Mientras tanto, junto con la ayuda de José Manuel Aguirre y luego de Benjamín García-Huidobro, Don Agustín va seleccionando cuidadosamente sus madres, que fortalecerán las bases del criadero, incluyendo yeguas como la gran Qué Luna (Borracho en Domingo-Endemoniá), Lista (Ingrato-Tramposa), Ricachona (Quillacón III-Camelia), Nicasia (Guardián I-Codiciada), Testera (Guardián-Clementina), Raquelita (Guardián-Clementina), Cachita (Ñipán-Naranjerita), Inocencia (Chagual-Plegaria II), Victoria (Morocho-Vergonzosa), madre del campeón de Chile Estribillo II; Tristeza (Morocho-Tincada), madre del Campeón de Chile Lechón; Talavera II (Farolero-Talavera), Agora Qué I (Cambalache-Agora Qué); Ociosa (Ñipán-Clementina), Guadaba (Diluvio-Elicura), provenientes de las crianzas de La Invernada, Piguchén, Muticura, Los Maquis y otros destacados criaderos.
Con esta base genética comienza la producción que marcará el sello de Santa Isabel, que usa principalmente al gran potro Estribillo, actualmente considerado el reproductor del siglo XX.
Obtiene del Riguroso al ejemplar Río Negro, considerado uno de los caballos más lindos que ha producido la raza. Ganó todas las exposiciones que asistió, como sus propios hermanos Río Claro y Rita.
Los éxitos deportivos
En lo deportivo, los éxitos que habían comenzado como Corral Santa Isabel, serían sólo el comienzo del plan original, consistente en correr y prestigiar la crianza propia, proveniente de esta selección de madres en combinación con Estribillo y Riguroso.
Inicialmente en la época de Coipúe los jinetes fueron José Manuel Aguirre y Oscar Bustamante, además de su hijo Oscar Bustamante Calderón, en ese entonces de 18 años.
En tiempos de Graneros, los jinetes de competencia eran Eduardo Tamayo, Ricardo de la Fuente, un Alberto Yáñez muy joven y Jesús Rodríguez en el arreglo; a los que se unen otro joven Luis Eduardo Cortés, por esos años incipiente promesa en la disciplina del Movimiento a la Rienda y se incorpora también al potro tres veces Campeón de Movimiento a la Rienda, Carretero, además el padre de Luis, Remigio Cortes, ya un arreglador de gran prestigio que pone su sello en los inicios de los caballos.
Carretero vuelve a ser Campeón de Chile en 1989 y 1990 con el chamanto de Santa Isabel, y montado por Luis Eduardo Cortés.
Finalmente se incorpora Juan Carlos Loaiza, quien junto con Eduardo Tamayo, se convierten a lo largo de los años en la collera de "mayor eficiencia en la historia del rodeo chileno" con seis títulos juntos.
Se inicia así la época de la cosecha para Santa Isabel en la crianza y en el deporte, logrando formar un rankeado plantel de madres como Esbelta, Escandalosa, Escultura, Escolta, Estribera, Es Cosa, Estirpe, Estimulada, Almendra, Barricada, Fiestera, Cantora y Alabanza, inédito en la historia de la crianza chilena.
Desde 1998 el criadero se encuentra en Futrono, mil kilómetros al sur de Santiago, con un seleccionado plantel de 50 yeguas de crías.
Entre sus reproductores tuvo al Río Negro e hijos de Estribillo como el Campeón de Chile Escorpión y su hijo Acero, al Vicecampeón Escándalo, al último hijo del Taco en combinación con la yegua Qué Luna, el famoso Talento, que fuera tres veces Campeón de Chile y su hijo Galanteo.
El criadero en su constante búsqueda de alternativas válidas y de calidad incorpora reproductores en forma eventual de líneas muy distintas a las habituales.
En su etapa más actual el potro base es el Fantástico que obtuvo dos veces el premio Sello de Raza nacional.
Incorporando sangres distintas alternativas pero muy exitosas se adquiere el Nudo Ciego (Rotoso – Retoque – Ñipán – Clementina), que ha sido además un gran aporte al sello racial en la reproducción.
Santa Isabel desde hace muchos años a través de sus remates de producción anual, ha incorporado a la crianza nacional una gran cantidad de reproductores machos y hembras a los más diversos planteles del país. En las Exposiciones Morfológicas y en los Rodeos figuran constantemente productos nacidos en el criadero y que han seguido fuera de él sus exitosas campañas.
En opinión de los aficionados y entendidos, el criadero Santa Isabel, junto a Aculeo, Curiche y Las Camelias, son las crianzas más importantes de la historia de la Raza Pura Chilena.
Todos los ejemplares Campeones de Chile han nacido, criado y se han arreglado en el criadero, situación inédita también en la historia.