Un jinete bravo fue Sergio Bustamante Barahona

Destacado miembro de la dinastía Bustamante originarios de Teno, que fundara a principios del 1900 el legendario jinete Jesús Regalado Bustamante 1°, más conocido por “Don Jecho”, ídolo popular, cuya vida fue una leyenda la que relataremos en otra oportunidad.

Sus hijos jinetes y “arregladores” fueron Jesús, Oscar, Clemente, Bartolo, Manuel, Julio, todos grandes campeones. Nietos famosos: Oscar, Sergio, Galo, Nene, Arturo... bisnietos actuales muchísimos.

En sus inicios estuvo en el fundo Santa Rita en Pelarco que administraba su padre Jesús Bustamante Salas a la abuela de Ricardo Ibáñez Letelier, Margarita Velasco, y donde también trabajaba el famoso don “Chuma” Celis, y en los veranos se juntaban los primos Ricardo Ibáñez y Ricardo Letelier y corrían enseñados por don Jecho y Sergio y Galo, todos niños.

Dicen que iban escondidos a mirar a través de las ramas trabajar caballos a Don Chuma, que lo hacía muy privado.

Cuando tenía 8 años Sergio Bustamante corrió el rodeo de Teno en collera con Oscar montando los caballos Rancherito y Estoquillo y obtienen un 2° premio por lo cual su abuelo le regala los caballos.

Vio correr a su abuelo en un rodeo de Curicó con su tío Oscar montado a los caballos Churrasco y Buena Pinta.

Después ya como jinete fue al corral de J. Antonio “Toño” Acevedo a Molina, y corrió con Juan Antonio Acevedo Daza, teniendo éste 9 años en Nacional de Curicó en 1957, estando en ese corral también como jinete Raúl Cáceres U. Otro discípulo de don Jecho.

Ya más grande Sergio llegó al corral de Jorge Lasserre L., a Trongol ubicado en Yerbas Buenas, fundo San Agustín, y comienza una etapa brillante de su carrera.

Jinete de ranking siendo, 9° en 1965, 10° en 1966, 4° en 1967, 5° en 1968, 2° en 1969, 7° en 1972, 4° en 1974.   

Famosos fueron sus caballos Timbalero, Jalisco y Querendón, Cereza y Quebrantada, Chilote y Rancherito, Indio y Moscatel, con los que los hermanos lograron grandes triunfos.

Sergio fue jinete en Trongol de la Desideria, Malta, Dudosa, y una gran cantidad de caballos más.

En ese corral estaban también el joven aún Galo, además Rubén “Tata” González y “Toreque”.

En el Nacional de Talca en 1969 premió para la final con tres jinetes distintos, con Jorge Lasserre L., con Galo Bustamante y Rolando Montory L.  

Algo de su campaña:

En 1965 fue 2° en San Clemente con Rancherito y Timbalero con don Jecho, 1° en Yerbas Buenas y 2° con Desideria y Beldad de Trongol, 1° en Linares en Chilote y Timbalero, 1° en Monte Águila con Timbalero y Mentirosa con Oscar, 1° en Arauco en Ojalera y Desideria de Trongol.

En 1967, 1° en Talca Timbalero y Chilote, 2° Molina, Trongol en Nubia y Aclamación, 1° en Talca, Trongol en Beldad y Araucano, 2° Longavi en Timbalero y Querendón, 1° San Carlos, Trongol en Nubia y Aclamación,

1° Lebu en Timbalero y Querendón, 3° Trongol en Malta y Cortesana, 3° en Arauco, Trongol en Malta y Cortesana.

En 1974, 1° en Fresia en Carretera y Forastero, 1° en Frutillar,    

Y sigue así por un montón de años.

Fue junto a su hermano Galo constante ganador del rodeo más importante del país de su época, el de Maipú, en Indio y Moscatel, en Jalisco y Querendón, hasta que se avecinda en Los Muermos en Puerto Montt, y corrió allá durante largas temporadas.

En 1974 fue Campeón de Chile con Galo en Forastero y Carretera.

También corrió caballos del criadero Lo Miranda con su hermano.

Fue un jinete que se caracterizaba por su bravura y eficiencia, no recuerdo haberlo visto en el piño, atajaba siempre como fuera, de estilo duro, gran espueleador y muy efectivo, corría con el alma y el corazón, como si en cada atajada se le fuera la vida, no ha habido alguien similar.

Fue competidor de las colleras de Ramón Cardemil y Ruperto Valderrama, de Santiago Urrutia y Samuel Parot, de Pablo Quera y Raúl Cáceres, de José Manuel Pozo M. y Edmundo Donaire, de “Coteco” Aguirre y Raúl Rey, de Santiago “Loro” Angulo y Tito Gaedicke, todos grandes competidores.     

Fuera del corral era un hombre bueno, atento, de grandes amigos, y muy querido por la afición, con Galo eran los famosos “alicates”.   

En los últimos años una dolorosa enfermedad lo tuvo alejado de las medialunas y falleció el 24 de junio del año en curso, la historia del rodeo lo recordará por siempre.