Luis Ignacio Urrutia y Juan Ignacio Meza entraron a la galería dorada del rodeo chileno

Por Héctor Parraguirre Jara, enviado especial a Rancagua.

Seguramente cuando Luis Ignacio Urrutia y Juan Ignacio Meza despertaron este lunes, deben haber pensado que todo lo vivido en la tarde noche del domingo fue un sueño: entrar al cuarto toro de la Final del 67° Campeonato Nacional, estar compitiendo a la par con Santa Isabel, Vista Volcán y Palmas de Peñaflor y terminar superándolos en una Medialuna Monumental llena hasta las banderas era algo quimérico.

Pero fue realidad. Los jóvenes jinetes de la Asociación Santiago Sur, que representan al Criadero Torreón, rompieron todos los pronósticos y con carrera perfecta incluida, se llenaron de gloria en Rancagua convirtiéndose en los nuevos Campeones de Chile tras totalizar 37 puntos buenos en los lomos de Las Toscas Arremángamelo (166563) y Don Valeriano Preferido (184137).

El broche de oro para una Serie de Campeones inolvidable, que entretuvo, emocionó y mantuvo la incertidumbre sobre quién podía ganar desde el primer al cuarto toro.

Las series del Chileno ya habían dejado la vara alta en cuanto a espectacularidad, pero lo que pasó a partir de las 14:42 horas en el principal recinto corralero del país, se ganó una página en los anales de la historia.

Partida emotiva

Luego del ingreso de los pacientes del Programa de Hipoterapia de la Federación del Rodeo Chileno, del izamiento del pabellón nacional a cargo del presidente Cristián Moreno y del vicepresidente Cristián Leiva, y de la bendición a los participantes de la Final realizada por el padre Dietrich Lorenz, ingresaron los familiares y amigos de Italo Zunino Muratori y Nicolás Fossatti Vilches.

El directorio de la Federación en pleno le hizo entrega de un reconocimiento a las familias Zunino Besnier y Fossatti Vilches, quienes luego, como una manera de agradecer todo el cariño demostrado tras la lamentable pérdida de sus seres queridos soltaron numerosos globos blancos al viento.

Inmediatamente después, Italo Zunino Besnier, hijo de Italo Zunino Muratori; Agustín Fossatti, padre de Nicolás Fossati Vilches; y Karl Eschert Arancibia, nieto de Pedro Arancibia Godoy; corrieron el Novillo del Silencio en homenaje a los socios fallecidos durante la temporada.

Con las colleras ordenadas, Manuel Bunster y Benjamín García-Huidobro, acompañados por Gabriel Varela, eligieron el Sello de Raza, que recayó en la yegua Mencahue Tranquilla (156694), montada por Sergio Abarca. Sus medidas son 1,37 metro de alzada, 1, 78 metro de cincha y 18 centímetros de caña.

Tres de 12 al comienzo

En la previa, todavía estaba en la memoria la gran jornada del viernes de Schawky Eltit y Pedro Juan Espinoza, por lo que muchos los tildaron de favoritos. Otros más tradicionalistas se inclinaron por Santa Isabel y algunos también apostaron por Vista Volcán, Palmas de Peñaflor y Lo Miranda.

Pero a las 15:36 horas, las 39 colleras de la Serie de Campeones arrancaron en igualdad de condiciones y así se hizo ver al menos en el primer toro, donde los puntajes fueron parejos, a excepción de tres parejas.

Nicolás Barros y José Antonio de la Jara en Gran Rancho Arriero y Madrigal Pertiguero; Juan Luis de la Jara y Pablo Aninat, del Criadero El Peñasco de Santa Sylvia en Payita y Doña Inés; y Felipe Undurraga y Richard Villaseca, ganadores del Repechaje Centro Norte en Amancay Don Tunino y On Franco On Franco, partieron con 12 de los buenos.

Detrás de ellos varias colleras con quedaban con nueve y ocho, en un corte que fue de cinco y que dejó fuera al Criadero Alucarpa, primero de los Campeones de Clasificatorios que se despedía de la Final con solo cuatro puntos.

La perfecta de los cabros y el show de Henseleit

Ya en el segundo toro los puntajes empezaron a subir. Eltit y Espinoza se soltaron después de un tibio comienzo de cinco buenos y le pusieron 11 en Vista Volcán Estafado y Las Terrazas de San Isidro Tandeo, para quedar con 16.

Pero las miradas empezaron a centrarse en la pareja de Mario Henseleit y Alexi Troncoso, en especial en el primero. La pasión del calvo jinete de la Asociación Osorno para celebrar cada atajada lo empezaron a convertir en regalón del público tras los 11 buenos que anotaron en Malal Mahuida Tallador y Génesis Campanario, que también los dejó en 16.

Henseleit se golpeaba el pecho y manoteaba al aire, gestos atípicos en el rodeo, pero que le valieron ganarse el cariño del "respetable".

Como también lo hicieron los jóvenes Urrutia y Meza, con una carrera perfecta que los catapultó al primer lugar con 21 buenos. La ovación se hizo sentir para estos corredores, pero detrás venían "perros grandes" dispuestos a perseguirlos.

Alfredo Moreno y Luis Eduardo Cortés en los criados del Palmas de Peñaflor Condesa y Cacique, Campeones del Clasificatorio Zona Centro, se apuntaron con 12 buenos y quedaron con 19; José Rojas y Sebastián Walker, del Vista Volcán, estaban con 18 (tras dos carreras de ocho) en Remolienda y Se Te Nota, vencedoras en el Clasificatorio Zona Sur; y los defensores del título, Eduardo Tamayo y Juan Carlos Loaiza, del Santa Isabel, marcaron 11 y llegaron a 20 en Dulzura T.E. y Delicada T.E.

En cuanto a los líderes del primer toro, Barros y De la Jara subieron a 19, De la Jara y Aninat hicieron lo propio, mientras que Undurraga y Villaseca se despedían con 13 tras sumar solo el punto de salida en el segundo huacho.

También se iban los Campeones del Clasificatorio Zona Norte, Juan Pablo González y Diego Ordóñez en Casas de Bucalemu No Embrome y Voy y Vuelvo con 11 puntos en dos novillos.

El zarpazo de los maestros

Quedaban 12 colleras, que pasaron el corte con 16 buenos y disputaban el tercer animal.

Vista Volcán tenía otra carta, Poncho Al Viento y Corajudo, que con un rendimiento parejito (8+9+8) acumulaban 25 puntos y pasaban al cuarto toro.

Henseleit y Troncoso dieron otro golpe con 11 buenos y el público se rendía a sus pies. El grito de "pelao, pelao" se hacía sentir fuerte y el aludido respondía con mayores muestras de euforia. Tenían 27 puntos en tres huachos y a esa altura, por qué no, se convertían en candidatos a la corona.

Urrutia y Meza perdían su ventaja al sumar solo cinco y quedar con 26, superando el corte por apenas un punto.

Mientras tanto, Moreno y Cortés anotaron 10 y subieron a 29, Rojas y Walker le pusieron 11 y también llegaron a 29, y los aún vigentes Campeones de Chile conseguían igualmente 11 y saltaban al liderato con 31.

Los "maestros" y multicampeones del rodeo chileno hacían ver que no necesitaban correr mucho esta temporada para estar nuevamente en la pelea por el título y en ese momento se adueñaban del favoritismo total.

La proeza de dos muchachos

Pero el rodeo no termina hasta el último toro y lo que vino en el cuarto animal no estaba en los planes de nadie.

Ya habían quedado atrás Barros y de la Jara con 22, Eltit y Espinoza con 24 y El Peñasco de Santa Sylvia con 23.

También se fueron Gustavo Valdebenito y Luis Fernando Corvalán, de Peleco, en los Vicecampeones del año pasado Compadre y Quitralco con 23, finalizando un irregular Campeonato Nacional para ellos.

Quedaban solo seis colleras dispuestas a darlo todo. Y Vista Volcán abrió en Poncho Al Viento y Corajudo, pero la cosecha fue negativa: tres malos para bajar a 22.

Henseleit y Troncoso se la jugaron enseguida, con la Monumental encendida y volcada a su favor, pero tampoco pudieron y con cinco malos retrocedieron también a 22. La ovación se la ganaron de todas formas con una notable actuación.

Corrían Urrutia y Meza, con todos pendientes de las últimas tres colleras que debían correr. Pero ya la primera atajada hizo que se acordaran de los "cabros". Como si fueran viejos curtidos, a los muchachos no les tembló la mano y atajaron como gigantes: 11 buenos y con 37 dejaban la presión al resto. Cualquiera cosa para ellos era ganancia.

Palmas de Peñaflor apenas sumó dos puntos y se olvidaba del podio de los tres primeros con 31 y Vista Volcán aseguraba al menos el tercer lugar con una carrera de 7 que lo dejó en 36.

Urrutia y Meza continuaban liderando, pero faltaban Tamayo y Loaiza. Todos pensaban que los iban a superar y estuvieron a punto, pero esta vez el destino quiso otra cosa. Solo 4 buenos para los consagrados y un total de 35 que los dejaba incluso detrás de Rojas y Walker, como Terceros Campeones.

Luis Ignacio Urrutia y Juan Ignacio Meza se convertían en los nuevos monarcas y entraban a la galería dorada del rodeo. Los abrazos y felicitaciones brotaron de todos lados, mientras los jóvenes jinetes esperaban que la alarma los despertara de la ilusión. Pero ésta nunca sonó, porque no fue un sueño muchachos, ustedes fueron los mejores de la Final, ustedes son los Campeones de Chile.