Ruperto Valderrama: Fue como renovar mi vida corralera
Una verdadera constelación de astros de nuestro deporte corralero se dio cita en el Rodeo de Campeones, que por primera vez se efectuó en la Semana de la Chilenidad, gracias a la gestión de Mauricio Acevedo, vicepresidente de la Asociación Cordillera de Criadores de Caballos Chilenos.
Y uno de los astros más requeridos fue, sin duda, el legendario Ruperto Valderrama, que tras correr dos toros con Pedro Pablo Vergara, otro ex Campeón de Chile, conversó con Caballoyrodeo.cl sobre esta experiencia.
"Para mí fue como renovar de nuevo la vida corralera, porque yo tuve una actuación bastante positiva que lo da la suerte y lo da la calidad de los caballos. El jinete insinúa nomás, pero el caballo es el que hace todo", enfatizó.
Al preguntarle qué le pareció encontrarse con tantos campeones de Chile, con tantos viejos conocidos y con jinetes jóvenes, respondió: "Es un honor que hayan llegado tantos jinetes de campeonatos de Chile y haber tenido una convivencia con ellos, que es muy halagadora y también para seguir conociéndolos hasta que nos muramos".
Respecto de la posibilidad de haber ganado este rodeo tan especial, manifestó: "Claro, pero me prestaron un caballo que no es de los míos; yo me subí ayer nomás y no responde".
Pero en todo caso, participar en este rodeo le sirvió para recordar aquellos viejos tiempos en que corrió con Ramón Cardemil y fueron varias veces Campeones de Chile (los años 1962, 1963, 1965, 1967 y 1968).
"Claro, lógico, es que los caballos nuestros eran de otra laya, no como estos caballos que no tienen ni boca. Esta se me puso dura, lerda y cuando la espuelié se me puso dura. A los caballos míos no había para qué hacer eso. Los caballos míos lo hacían todo ellos. Uno insinuaba; los que estaban más atrasados y con la insinuación hacían lo que debían hacer. Eran muy buenos los mancos", expresó.
Dijo tener 82 años cumplidos, que continúa jugando fútbol, pero que ya no está andando de a caballo.
"De a caballo no porque estuve 67 días en el hospital por una pancreatitis aguda. Estuve más en la muerte, según el médico y ha sido muy amargo para mí tener que pasar tantos días en el hospital en una cama con puros fierros y con una colchoneta muy delgada. Salí enfermo de los riñones, de la cintura. Entonces, para mí, caer de repente y con una pancreatitis que no se pensaba nunca es harto negativo y harto doloroso para uno también".
Volviéndolo al presente, le consultamos si a pesar de no haber premiado, igual quedó contento con haber participado en este primer Rodeo de Campeones, a lo que respondió: "Sí, de todas maneras, estar entremedio de todos los grandotes es como recordar el tiempo pasado".