Con escolta de a caballo partió "Don Yayo" a su descanso eterno
Una escolta de 30 huasos de a caballo, pertenecientes a distintos clubes y muchos amigos de a pie, acompañaron el viaje de Eduardo Porte Fernández, "Don Yayo", hasta su última morada en el cementerio de Catapilco.
Los emotivos funerales del director honorario de la Federación de Criadores, destacado zootecnista, jurado de exposiciones, criador y profesor emérito de la Universidad de Chile, se efectuaron en la tarde del lunes 15 de abril, después de una misa que se efectuó en la parroquia de pueblo y que se vio abarrotada por la presencia de tanta gente que llegó a rendirle su último homenaje a un gran hombre.
Luego del oficio religioso, donde entre los presentes estuvo el presidente de la Federación de Criadores de Caballos Chilenos, Agustín Edwards; el vicepresidente Luis Iván Muñoz; el director tesorero Sergio Covarrubias; el director secretario general César Núñez; el director Luis Valentín Ferrada; el gerente José Miguel Muñoz; la presidenta de la Asociación Nacional de Caballos de Rienda, Thérese Matthews; el director tesorero de la Federación del Rodeo Chileno, Alejandro Decombe, además de presidentes de asociación como Cristóbal Bertelsen, Francisco Hanke, Cristián Court, criadores como Arturo Correa, Sergio Hirmas, Julio Loyola, Rafael Canihuante, corraleros, amigos y personas que lo conocieron, trabajaron con él y lo apreciaron en toda su dimensión, el cortejo se dirigió hacia el camposanto local, a pocas cuadras de la parroquia.
Escoltada por los huasos de a caballo y con los familiares del querido Profesor Porte encabezando el cortejo, la carroza se dirigió hasta el cementerio, teniendo como destino final el mausoleo de la Familia Porte Fernández.
Allí, en medio del dolor y la congoja imperante entre los presentes, César Núñez habló a nombre del directorio de la Federación de Criadores.
"Con mucho respeto y agradecimiento quiero expresar esta palabras en nombre del directorio de la Federación de Criadores de Caballos Chilenos y en el mío propio. Compartimos durante varios años la Comisión Técnica de nuestra Federación, donde usted era su presidente. Ahí pude apreciar su entrega por nuestro Caballo Chileno de un punto de vista racional, equilibrado, con mucha pureza, sin contaminación de ningún tipo", expresó.
"Trabajamos mucho tiempo en proyectos que serán la base para nuestra Federación y estudios a futuro, como por ejemplo: Reglamento Genealógico del Caballo Chileno, Reglamento Genealógico del Caballo Chileno Internacional, Reglamento del Sello de Raza, Estudios Morfológicos, ADN, Microchip, Transplante de Embriones, Inseminación Artificial y muchos otros trabajos científicos y prácticos", agregó.
"Profesor, fue un privilegio haber trabajado con usted y tenerlo como compañero en el directorio. Siempre en forma invariable fue de una actitud austera, humilde y trabajó silenciosamente con base científica, profesional. Ponía una mirada que daba el equilibrio frente a los criadores, que muchas veces la pasión nos juega malas pasadas o somos poco objetivos para el análisis de nuestro Caballo. Siempre admiré su capacidad para abstraerse de los adornos o elementos llamativos para analizar la morfología en su esencia. Agradezco la enseñanza que nos dejó, todo lo que dio y quiso por nuestro Caballo, sin esperar nada a cambio", aseveró.
También dijo: "Usted fue uno de esos hombres que nos toca conocer no muy seguido; una persona especial, capaz, sincero y con un a humildad que caracteriza a las personas sabias. Por eso fue declarado profesor emérito de la Universidad de Chile. Podría haber explicitado su obra en forma más extensa y con un alto nivel académico, porque así lo fue. Pero sé que no estaría acorde con la sencillez de su persona. Gracias Don Yayo en nombre de todos los amantes del Caballo Chileno, le debemos mucho y siempre estará en nuestro recuerdo".
Misión cumplida
Luego intervino Renato Herrera, jurado de exposiciones, quien recordó las innumerables veces que viajó con Don Yayo y que aunque ahora el viaje lo hizo solo para asistir a su funeral, igual estuvo acompañado.
"Nunca me sentí solo, encontré ganado a la vera del camino, en la medialuna de Los Vilos estaban los huasos galopando sus caballos, seguramente para el próximo domingo. Y cada vez que pare una vaca en el campo o entra un caballo a una pista de jura o a un rodeo, lleva algo suyo Don Yayo. En sus genes llevan algo suyo. Usted puede irse tranquilo; misión cumplida", enfatizó.
Seguir sus pasos
Dichas sentidas palabras de ambos oradores fueron respondidas a nombre de la familia por Bernardita Espinoza Porte, sobrina de Don Yayo, quien manifestó: "Quiero dar las gracias a todos los que nos acompañaron. Además decir que son todos amigos; todos entienden la gran partida hoy día y les pido por favor que se acuerden del tío. Que sigan los pasos de él, que se preocupen del Caballo de verdad, de corazón".
"Se nos va un gran hombre y la única manera de tenerlo con nosotros para el resto de la vida es su recuerdo y hacer lo que él más amaba: cuidar el Caballo. Gracias a todos por estar hoy día aquí con nosotros", señaló finalmente.